La hermandad de Jesús Despojado entraba en Campana con su paso de misterio cuando empezó a llover y tuvo que refugiarse en el Templo de la Anunciación. Minutos más tarde hacía lo propio el paso de la Virgen de los Dolores y Misericordia, cuyo manto iba protegido por un plástico. Aquí estuvimos presentes y pudimos comprobar el enorme esfuerzo que hicieron sus hermanos nazarenos, costaleros, capataces, acólitos y músicos, a los que pudimos ver empapados debido al fuerte chaparrón soportado. Enormes estuvieron nuestros amigos y contertulios "Fede" y su hijo José Carlos, que comandaban la cuadrilla de costaleros del paso de palio. Al entrar en la Anunciación se podía ver la cantidad de agua acumulada en el techo de palio que caía por la trasera del paso. Esta hermandad regresó esa misma noche a su Templo de Molviedro.
La Estrella, la Valiente, fue la única de esta jornada que pudo hacer su estación de penitencia con normalidad aunque, eso sí, parte de su cuerpo de nazarenos padeció la lluvia antes de la salida, ya que los mismos forman sus tramos en la calle. Muchos de los vecinos del barrio daban cobijo a esos hermanos de túnica en sus casas. De forma brillante se paseó por Sevilla esta hermandad, con la banda de Desamparados en cruz de guía, Presentación al Pueblo de Dos Hermanas tras el Señor de las Penas, y la centenaria banda de la Oliva de Salteras tras el palio de la Estrella.
Dejemos nuestras impresiones en forma de comentario, y así llevaremos con mas alegría el día a día de nuestro rinconcito...
Un Domingo que se presentó con luz y se estropeó cogiéndonos por sorpresa. En cualquier caso, pudimos disfrutar un poquito. Otra vez se ha ido la Semana Santa, pero viviremos este año llenos de recuerdos y buenos momentos. Un fuerte abrazo amigos, ya estamos por aquí de nuevo.
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